A Colombia le hacen falta políticas para explotar su potencial agropecuario y agroindustrial

  • En el III Congreso de Financiamiento y Comercialización Agropecuaria, FYCA, se llamó la atención en torno a aspectos críticos, necesarios para aprovechar el potencial del sector.

  • Brasil, México, Italia, Argentina, Chile y Canadá, países que dejaron lecciones a Colombia en materia de comercialización y financiamiento sostenibles para el agro

     

  • Los organizadores anunciaron que en el marco de este evento, se logró un acuerdo con el grupo Desarrollo Internacional Desjardins y la Financiera Agrícola de Quebec Desarrollo Internacional, Banco Agrario y Finagro para perfilar una alianza con la BMC, la SAC, y Portafolio, tendiente a desarrollar modelos de negocio en temas de financiamiento.

 

Cartagena, noviembre 03 de 2015. En un momento en que la economía colombiana sufre la caída del precio internacional del petróleo y sus consecuencias, surge la necesidad de llamar la atención de la sociedad colombiana y del gobierno en torno a definir y concretar la importancia del campo en las políticas, si es que de verdad, se valora su potencial productivo y comercial para el país.

Este fue el tema principal de Fyca 2015, el Congreso que desde hace tres años reúne a los empresarios del sector para actualizarlos e inspirarlos con casos y estrategias internacionales y nacionales.

Entre los temas a destacar para incentivar la inversión, el presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia, SAC, Rafael Mejía López, destacó la importancia de factores como la disponibilidad y calidad de bienes públicos, seguridad jurídica y una estructura tributaria que esté a favor del desarrollo empresarial.  Así mismo, llamó la atención sobre la inconveniencia del proyecto de ley que elimina el tratamiento especial que debe tener el agro, en los temas de normas de competencia.

«Seguimos creyendo en Colombia y su campo. Si el Gobierno dice que el campo es su prioridad, debe demostrarlo con sus políticas», afirmó Rafael Mejía López, presidente  de la Sociedad de Agricultores de Colombia.

Por su parte, Francisco Estupiñán, presidente de la Bolsa Mercantil de Colombia, BMC; hizo énfasis en la importancia del acceso al financiamiento y a nuevos instrumentos como derivados, futuros y coberturas para el sector, y destacó el papel de la BMC como un instrumento financiación no bancaria y de comercialización  de los productos agropecuarios en Colombia.

«El campo colombiano necesita un cambio radical y cultural, así como estrategias tendientes a reducir brechas entre lo urbano y lo rural. Con acceso a crédito se puede contribuir a afianzar la inversión», manifestó.

Oswaldo Castelletti, asesor del Incoder, destacó la estrategia del marketing territorial, a Italia y  la importancia de que el territorio «marque la diferencia», un tema en el que Colombia tiene potencial y tiene un camino por recorrer. Aún así, cabe resaltar el desarrollo de programas como Juan Valdez, administrado por la firma Procafecol, que con asociación y diferenciación de producto logró el éxito de la marca en Colombia y el exterior, caso presentado en Fyca 2015.

Y si bien el país tiene el potencial productivo, el entorno político, social y económico debe apuntarle a su desarrollo. Desde el punto de vista de Eduardo Cárdenas, CEO de ASC Co. Ltd., comercializadora de productos congelados en Asia, a Colombia le falta visión de emprendimiento para aprovechar las oportunidades que existen en mercados asiáticos.

La calidad, en términos de inocuidad y condiciones fitosanitarias, es otro de los puntos que se trataron en el congreso Fyca, pues se mencionó que es requisito indispensable para los productos que quieren entrar a mercados internacionales. También lo es el valor agregado, conocido como la innovación del producto en términos de funcionalidad, salud, categorías destacadas, para fortalecer las ideas locales.

Para lograr este propósito, Antonio Walker, gerente agropecuario de Wapri, Chile, destacó la importancia que tuvo para su país un gobierno que se preocupa por las buenas prácticas agrícolas, pues indicó que trabajar en el campo genera ingresos en las zonas rurales, aparte de apoyar en el cumplimiento de las normas laborales. 

Las cadenas de valor y la infraestructura comercial fueron un tema de debate. En él participó el invitado internacional Eugenio Stefanelo, asesor del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de Brasil, quien señaló que en los agronegocios «ganan los que son competentes con calidad, productividad y costos bajos con valor agregado», destacando así la importancia de la integración de la cadena, desde los insumos hasta el procesamiento y la comercialización del producto final.

En el panel participaron los presidentes de los gremios: Rafael Hernández de Fedearroz, Jens Mesa de Fedepalma y Andrés Valencia de Fenavi, que destacaron la importancia del desarrollo de la infraestructura para la competitividad del sector, pues la logística en Colombia pesa mucho en el costo y hace más barata las importaciones.

El módulo «Mecanismos para dinamizar el crédito agropecuario», moderado por Estupiñán Heredia, contó con la conferencia central de MarjolaineCarrier, de la vicepresidencia de mercados agropecuario y agroalimentarios de DesjardinsGroup, Canadá, quien dio una visión del éxito del crédito para el desarrollo del sector en su país. Destacó la importancia de la gestión empresarial de unidades agroproductivas familiares, el sistema de organización colectiva de la comercialización,  con base en cooperativas fuertes; así como el fácil acceso al crédito para los agricultores.

De las experiencias de países como Chile y Brasil, en el panel políticas de generación a la inversión, surgió el planteamiento de hacer una diferenciación entre la agricultura familiar y la «comercial», como lo han venido haciendo sus gobiernos, a través de ministerios diferentes.

Tecnologías de la información, clave para el posconflicto

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La discusión en torno al e-commerce y las TIC estuvo centrada en el papel de la información, comunicación y transferencia de conocimiento a través de la tecnología para el desarrollo productivo del campo, con herramientas que van más allá de las aplicaciones tradicionales.

En innovación, las TIC tendrán un papel determinante en el posconflicto, pues servirán para integrar a la población rural, contribuir al proceso de reintegración de los actores del conflicto a la sociedad y seguir acercando el campo a la ciudad.

Sobre las recomendaciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, OCDE, para el desarrollo del agro y la agroindustria en Colombia, se compartieron opiniones e inquietudes sobre el trato preferencial que recibe este sector en sus países miembros, mediante incentivos y apoyos, poniendo en contraste algunas recomendaciones de esta organización con el entorno internacional.