Revista Nacional de Agricultura
Edición 1050 – Agosto 2024

A poco más de un mes de la COP16 que se realizará en Cali, Cenicaña lanzó un manual para orientar las acciones de conservación y protección de la avifauna en torno a la actividad de producción de la caña de azúcar en el valle del río Cauca. Sobre el manual, titulado “Un canto dulce: las aves en la caña de azúcar”, la Revista Nacional de Agricultura habló con Freddy Garcés, director de Cenicaña.

Revista Nacional de Agricultura: ¿Cómo y cuándo nació la idea de producir un manual para proteger y conservar a las aves de la caña de azúcar?

Freddy Garcés: El proceso arrancó hace poco más de tres años con otras organizaciones, la National Audubon Society y la Asociación Calidris, con las que veníamos trabajando en un proyecto que tenía que ver con los corredores bilógicos. Desde esa época, Cenicaña viene trabajando en el fomento de la conservación y pensando en el control biológico por conservación y surgió la idea de trabajar en un manual donde no solo se cuente la historia detrás del cultivo de la caña sino todas las acciones, recomendaciones, que pueden llevar, a través de un plan muy concreto, a cumplir esos objetivos de conservación y restauración para todo el agropaisaje del valle del río cauca. 

R.N.A.: ¿Cuáles son esos ecosistemas que componen lo que ustedes llaman el agropaisaje, en el que se incluyen los cultivos de caña?

F.G.: El agropaisaje lo hemos planteado pensando en la zona plana, un poco más de 400.000 hectáreas en las que tenemos diferentes tipos de ecosistemas y de cultivos. Está el ecosistema natural que ha caracterizado el valle del bosque seco tropical, hay algunos relictos que existen en la zona y que los estamos protegiendo; allí hay algunos bosques que están cercanos a cultivos de caña de azúcar. También hay ecosistemas acuáticos, que son poco más de 2.800 hectáreas donde también hay humedales.

Por otro lado, hay agroecosistemas compuestos por cultivos frutales, otros cultivos de ciclo corto, particularmente arroz y caña. La caña tiene 238.000 hectáreas que están ubicadas desde el norte del Cauca hasta el Valle. Todos estos ecosistemas hacen parte de lo que nosotros consideramos el agropaisaje del valle del río Cauca.

R.N.A.: El primer capítulo de este manual se titula: “Las aves al servicio de los agroecosistemas”, ¿a qué servicios se refieren?

F.G.: El sector agroindustrial de la caña de azúcar se planteó hace cuatro décadas un trabajo con el corredor biológico con una cultura de no aplicar insecticidas para controlar la principal plaga que está presente. Lo que hicimos fue promover estos corredores para fomentar especies que permitan generar agentes de control biológico que se puedan multiplicar. De manera particular hay una especie que se llama Genea jaynesi que ejerce el 60% de control de la plaga de la caña.

Hemos visto un incremento en los polinizadores que ofrecen un servicio valioso para la agricultura y sin el cual no podemos vivir. También se han incrementado especies como abejas sin aguijón. Esto tiene que ver con servicios de regulación.

En términos generales, los servicios son sostenimiento, aprovisionamiento, regulación y culturales; este último tiene que ver con visitas a parques para avistamiento de aves.

R.N.A.: ¿Qué prácticas o recomendaciones que van a encontrar en este manual tanto los cultivadores de caña como los ingenios?

F.G.: La primera parte del manual es para conocer lo que tenemos; se describe a las aves, la importancia que estas tienen en general y qué tipos de aves podemos encontrar en los agroecosistemas. En el Valle del Cauca, por ejemplo, se han identificado 422 especies de aves; en caña hay un poco más de 130, en arroz unos 150, entonces hay una diversidad muy valiosa que es importante conocer.

Luego entramos a contar una serie de recomendaciones para que se puedan generar esos espacios donde las aves puedan llegar y se pueda incrementar esa diversidad.

Hablamos también de la caña resiliente, de cómo a través de la investigación, el desarrollo de soluciones de productos y herramientas, podemos enfrentar la variabilidad climática que nos está afectando a todos los agricultores en Colombia y que podamos mitigar el impacto que pueda tener en la biodiversidad.

En el manual también encontrarán un plan que le permita a cualquier persona interesada en la protección, no solo de caña, las líneas base de cómo priorizar, identificando fortalezas y debilidades, acciones y objetivos para el sueño de proteger y conservar las aves.

R.N.A.: ¿Cuál es la apuesta de Cenicaña en esa labor de atraer a más cultivadores hacia la sostenibilidad?

F.G.: Fue un compromiso que tanto cultivadores como ingenios se plantearon ya hace 46 años de invertir en la innovación para generar una sostenibilidad no solo del sector sino también de la región y por eso la misión de Cenicaña es aportarle a la sostenibilidad del país a través de la innovación en el sector agroindustrial, y eso va en los tres pilares: el social, ambiental y el económico.

En esa línea, hemos tenido diferentes acciones que permiten tener una región mucho más sostenible; un sistema productivo ejemplo en todos los temas de sostenibilidad. Las variedades que se han desarrollado a nivel local han permitido, desde diferentes enfoques, ser el sector agroindustrial más productivo a nivel mundial y que usa de manera eficiente los recursos naturales como el agua, el suelo y el aire.

R.N.A.: Uno de los últimos capítulos de este manual habla de la evolución del cultivo de la caña hacia la resistencia climática, ¿en qué tecnologías ha estado trabajando Cenicaña para eso?

F.G.: Cenicaña es un centro de investigación sin ánimo de lucro, es una corporación privada que viene trabajando en diferentes líneas desde el campo, pasando por la cosecha y la fábrica, y lo primero que se estableció fue una serie de redes que le ha permitido generar mucha información. Son redes de telecomunicaciones, una red meteorológica automatizada, por ejemplo, que nos ha permitido conocer de manera espacial el clima y los suelos. Con esto, se han tomado acciones que permiten desplegar información y llevarla a ingenios y cultivadores con herramientas web y móviles. Esas herramientas generar soluciones para que se tomen decisiones informadas y basadas en ciencia.

Descargue aquí en PDF el Manual “Un canto dulce: las aves en la caña de azúcar”:

https://www.cenicana.org/pdf_privado/otros/libro_aves/Un_canto_dulce_Digital.pdf