La SAC pide ayuda al Gobierno para que no se lesione la agroindustria de Biodiesel y Etanol en Colombia
• A través de una carta, la SAC expresa al presidente Santos su posición frente a la medida de congelar los precios de los biocombustibles.
• Recuerda que el mismo Estado colombiano impulsó la producción de biocombustibles como política pública para cumplir compromisos en materia de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y cuidado del medio ambiente.
• Con la fórmula planteada por el Ministerio de Minas y Energía y la Creg, se estiman pérdidas para el sector palmicultor por $22 mil millones y de $18 mil millones para los azucareros.
Noviembre 02 de 2016. En misiva enviada al Presidente de la República, Juan Manuel Santos, el Presidente de Junta Directiva de la SAC, Alejandro Estévez, le solicita su ayuda de carácter urgente para evitar que la propuesta de resolución para la determinación de los precios del biodiesel y etanol que se viene estudiando desde el Ministerio de Minas lesione estas agroindustrias en Colombia, con los consecuentes costos sociales que ello implica.
Estévez plantea que el objetivo de producir biocombustibles en Colombia fue impulsado por el Estado colombiano como política pública para cumplir compromisos en materia de disminución de emisiones de gases de efecto invernadero y cuidado del medio ambiente.
Indica la comunicación que los precios de biodiesel y etanol obedecen a los costos de producción internacionales de este producto que no es un combustible, sino un oxigenante medioambiental del combustible que no es sustituto ni de la gasolina, ni del ACPM, por lo que sus precios no son comparables con estos. Así mismo, se señala que la participación de los biocombustibles en el peso total de la gasolina y el ACPM es marginal, alrededor de 8%, por lo que con el ajuste propuesto no se reduciría significativamente el costo total de los combustibles en Colombia.
La SAC estima que si se hubiera aplicado este año la fórmula que se encuentra en estudio del Ministerio de Minas y Energía y la Creg, el sector palmicultor de Colombia habría perdido alrededor de COP$22 mil millones promedio por mes y el sector de la caña de azúcar habría perdido más de COP$18 mil millones, lo que los haría inviables y llevaría a desaparecer en un breve lapso de tiempo.
Por último, la SAC solicita al gobierno discutir el tema en el foro que corresponde como es la Comisión Intersectorial de los Biocombustibles, en la que participan 5 miembros del Gabinete y los afectados con las propuestas que se están analizando. Para tal efecto, nos ponemos a disposición del primer mandatario para colaborar en lo que sea necesario en beneficio del ambiente y del desarrollo que tanto necesitan nuestro campo colombiano y su población.