Revista Nacional de Agricultura
Edición 1049 – Julio 2024
El 18 de julio, en rueda de prensa, el Gobierno Nacional presentó un panorama del impacto que podrían sufrir varios sectores y territorios del país cuando inicie el fenómeno de La Niña, y el plan nacional para enfrentarlo. Según el Ideam, que viene alertando desde marzo por la probabilidad de que se dé en el segundo semestre del año, este fenómeno sería débil.
El director de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, Carlos Alberto Carrillo, dijo que “estamos hablando de un escenario preocupante” de La Niña que, dependiendo de si es moderado o débil, serían 600 municipios del territorio nacional los que pueden verse afectados, o hasta 900 municipios si es fuerte. Las regiones Andina y Caribe serían las más afectadas con “alto riesgo de deslizamientos e inundaciones”.
“Con o sin un fenómeno de La Niña intenso, es muy probable que tengamos unas graves afectaciones”, dijo el director, quien presentó las cifras de número de personas, viviendas, cultivos y animales que podrían sufrir calamidad; cifras a las que llegaron técnicos de la UNGRD a partir de cálculos históricos de este fenómeno.
Ante ese escenario, la UNGR estimó en el peor escenario, daños y pérdidas por $20 billones de pesos. Su estrategia, entonces, será de 5 fases que iniciaron en mayo pasado con un proceso de alistamiento en varios departamentos del país. La segunda fase será de preparación para la respuesta que empezó en junio e irá hasta agosto de este año. La tercera será de respuesta, que también se activó desde junio e irá hasta diciembre. Luego, en la fase cuarta, se daría la recuperación, entre octubre de este año y abril del 2025; y la evaluación del plan se hará en mayo de 2025.
Para todo esto, dice Carlos Carrillo, necesitarán $7 billones que se distribuyen así:
¿Qué se hará para el sector agropecuario?
La ministra de Agricultura, Martha Carvajalino, dijo en la rueda de prensa que vienen trabajando para que los productores agropecuarios tengan sistemas de información que les permitan tomar medidas tempranas, y enumeró algunas que impulsarán desde el Ministerio:
- Que los predios cuenten con mecanismos que garanticen el drenaje, la limpieza de los cuerpos de agua, la limpieza de los suelos.
- Monitorear el nivel de los cuerpos de agua y cuencas. Esto dependerá de un trabajo articulado del sector no solo a través de la AUNAP, sino de las entidades de MinAmbiente.
- Identificar y prevenir enfermedades y plagas, para lo cual el ICA dispondrá de toda su fuerza técnica en el territorio. Así, como medidas de prevención, lograremos tomar acciones tempranas que aseguren cultivos y producción pecuaria
- Respetar las rondas hídricas y reforestar aquellas zonas que permitirán que los cuerpos de agua tengan un proceso de encuentro con los suelos de manera protegida.
- Fortalecer las mesas agroclimáticas como una instancia de monitoreo, seguimiento y de toma de decisiones.
- Brigadas de salud animal, entrega de semillas tolerantes al exceso de humedad, dotación de insumospara la protección de los medios de vida agropecuarios y preparación adaptativa hacia modelos de agricultura sostenible y cambio climático.
La infraestructura vial
La nueva ministra de Transporte, María Constanza García, aseguró que la infraestructura vial es la de más alta vulnerabilidad ante estos fenómenos climática, algo que se evidenció con el último fenómeno de La Niña (2021-2023) cuando hubo “más de 4.700 emergencias en infraestructura, principalmente en carreteras, y este año 2024 ya hemos presentado 384 emergencias” por lluvias, con la región Andina como la más vulnerable.
Según el INVIAS, a julio de este año, se han registrado 281 emergencias en la red de carreteras no concesionadas, 124 cierres totales (6 de ellos vigentes) y 155 cierres parciales (7 de ellos vigentes).
Por su parte, la ANI informó que se han dado 103 emergencias en vías concesionadas con 6 cierres parciales vigentes y un cierre total vigente.
Fuente: MinTransporte.
Datos difundidos en rueda de prensa el 18 de julio de 2024.
La Ministra dijo que han ido estudiando “todas las emergencias desde el año 2017 para identificar los corredores más vulnerables y poder instalar toda nuestra capacidad, nuestros contratistas de mantenimiento, administradores viales” y a través de entidades del sector como “la ANI, el INVIAS, la Aeronáutica Civil, Cormagdalena, y poder disponer de todo el recurso maquinaria que nos permita en una fase de respuesta perder atender las emergencias que se presenten”.
Hoy son 21 corredores con la mayor presencia de emergencias que se monitorean permanentemente con base en datos que el Ideam comparte a diario.