Revista Nacional de Agricultura
Edición 1003 – Mayo 2020

Lo revela un estudio de la Asociación Colombiana de Universidades, que fue puesto en conocimiento del gobierno nacional.

La pandemia del covid-19 ha puesto contra la pared a las universidades colombianas, que tienen ante sí un futuro cercano bastante incierto. Germán Anzola, rector de la Universidad de Ciencias Aplicadas y Ambientales, Udca, dice que puede haber una gran deserción entre el alumnado.

Estudiantes, inconformes y sin un futuro claro

El sector de la educación superior ha sido terriblemente afectado. Las universidades, acostumbradas a un trabajo presencial, se han visto completamente alteradas, lo cual ha originado grandes inconformidades entre los estudiantes. Entonces, tenemos un presente con estudiantes inconformes, y un futuro muy incierto para ellos, frente a lo cual la directiva de la universidad no puede definir un camino para seguir.

Tenemos la esperanza de que la Presidencia de la República se pronuncie en favor de la apertura en el corto plazo de las instituciones de educación superior (primero de junio), con lo cual se podría salvar este semestre. Pero si el cierre se alarga, se corre el peligro de que se pierda, y eso afectaría el segundo semestre.

De todas formas, el cumplimiento de los protocolos de bioseguridad que se expidan va a ser algo complejo de cumplir aunque tenemos un campus de 15 hectáreas, con unas instalaciones que se prestan para cumplir con el llamado distanciamiento social, sin mayores dificultades. Pero el trabajo en aula tendría que reducirse a la mitad, lo que obligaría a duplicar horarios, con un fuerte impacto económico para la universidad.

Pero hay otro problema grave: a pesar de que los estudiantes pueden tener defensas contra el covid-19, son transmisores del patógeno.

Al abrir las universidades habría que abrir carreteras y aeropuertos

Cuando los estudiantes universitarios que no son de Bogotá fueron conscientes de la intensidad que iban a tener las medidas para contener la pandemia, se fueron para sus lugares de origen. Así las cosas, si se autorizara la reapertura de los centros de educación superior, habría un problema para el retorno de los muchachos si se mantienen las carreteras y los aeropuertos cerrados.

Hay una amenaza de una elevada deserción estudiantil

La Udca es una universidad que se caracteriza por la presencialidad. Entonces, lo que se denominó en un primer momento como “educación virtual”, que después pasó a llamarse“educación remota de urgencia”, ha llevado a unos niveles de insatisfacción significativa entre el alumnado, como ya dije. A pesar de que la educación virtual hoy en día es una realidad y es un recurso fundamental, debe ser bien hecha. Hacer una buena educación virtual demanda, por sobre todo, capacitación de los profesores. Uno puede dictar una clase como quien habla por teléfono, pero las cosas no son así de sencillas, porque la virtualidad necesita ser complementada con otras herramientas o recursos para que el estudiante aprenda.

La Asociación Colombiana de Universidades hizo un estudio que se le comentó a la ministra de Educación el 18 de mayo, según el cual existe una insatisfacción con la educación virtual que está por encima de 60%. Otro problema que se deriva de esto es que los estudiantes piensan que se les debería devolver el valor de la matrícula, y que si las cosas siguen así no se matriculan para el 2021. Entonces, existe la amenaza de una elevada deserción del alumnado de la educación superior.

Por otra parte, los padres de familia les están pidiendo a las universidades una reducción en el costo de las matrículas, por razón de la bioseguridad y porque han perdido sus empleos.

Por falta de prácticas, este semestre puede quedar inconcluso

Hasta la fecha, creo que se logró superar todo lo teórico con la educación remota, pero para profesiones como medicina, medicina veterinaria, agronomía y otras, que exigen sus correspondientes prácticas en campo o en laboratorio, el semestre queda inconcluso, debido a que llegamos a la semana ocho, de las dieciocho que hay en un semestre. Las cosas se podrían estirar hasta el 31 del mes número siete, es decir (julio), para que no se pierda el semestre. 

En el Ministerio hay mucha incertidumbre

En el Ministerio de Educación se observa mucha incertidumbre con respecto a la reapertura de las actividades académicas, por los riesgos que ofrecería la movilidad de los estudiantes, profesores y personal administrativo. En el solo caso de la Udca, se tendrían que mover 5.300 muchachos.