Revista Nacional de Agricultura
Edición 1035 – Abril 2023

Argentina alcanzó en marzo su inflación anual más alta desde 1991, llegando a 104,3 %, más de lo previsto por los analistas.

Solo en marzo, según los datos publicados a mediados de abril por el Gobierno de Argentina, la inflación de ese país se aceleró un 7,7 % por factores citados por Bloomberg como “la sequía histórica que vive el país, el gasto público excesivo” y “por una inercia que no cede en la antesala de la campaña electoral”, como señaló también el diario argentino La Nación.

El sector de alimentos y bebidas tuvo una inflación preocupante y también más alta de lo esperado por los expertos: 9,3%. En la Provincia de Buenos Aires, explicó La Nación, “la región con mayor cantidad de pobres, el aumento fue de 9,7%”, y todo eso, a pesar de la decisión del Gobierno de Alberto Fernández de congelar los precios de más de 2.000 productos de supermercados, controlar precios y acordar incrementos en otros rubros.

Este mismo diario cita al economista Nadin Argañaraz quien explicó que además de tener la inflación más alta de Latinoamérica, Argentina evidentemente tiene una de las cifras mensuales más altas del mundo. “Al observar otros 38 países del mundo, el valor mediano de los países relevados fue de 0,6% en marzo”.

Además, solo por encima de Argentina, en el ranking 2022 de países con más inflación estuvieron “Venezuela (305% interanual), Zimbabue (244%) y Líbano (142%)”, de acuerdo con datos de OCDE, INDEC y otros analizados por Argañaraz y citado en La Nación.

Tras conocerse las cifras de marzo, el presidente Alberto Fernández señaló culpables para un problema del que dijo, no obstante, ser “consiente”.

“Antes de la sequía nos agarró la guerra que impacta sobre todo el mundo por el aumento de los precios de la energía y de los alimentos. Y en Argentina se potencia porque arrancamos con 54 puntos de inflación, por lo tanto, se hace más grande el problema”, dijo el presidente en un evento del 17 de abril en el que echó culpas al Gobierno anterior de Mauricio Macri.

“La decepción de los cuatro años que presidieron nuestro Gobierno tiene que ver con tiempos donde la desocupación creció, las pymes se cerraron, la inflación llegó al 54%, donde el país se endeudó como nunca se había endeudado. Donde vimos fugar 23.000 millones de dólares de la noche a la mañana, y la decepción del presente tiene que ver con que, aunque hayamos creado un millón de trabajos formales (…) efectivamente hay problemas que nos quedan por resolver y que nos preocupan”.

La descomunal inflación argentina coincidió con la publicación de las perspectivas del Fondo Monetario Internacional (FMI) para la economía de América Latina para el 2023. Sobre Argentina, la inflación para el cierre de este año sería del 88%, IPC solo en diciembre del 98,6%, y el crecimiento de la economía de apenas el 0,2%. Sobre la inflación anual, el mismo Banco Central argentino había previsto 110%.