Revista Nacional de Agricultura
Edición 1010 – Diciembre 2020
Por primera vez, Agrosavia y el ICA hacen entrega de material de siembra como libre de enfermedades y patógenos de importancia económica para dichos cultivos.
Tal vez, la mejor noticia que recibieron este año los cultivadores de cítricos fue la reciente entrega, por primera vez, de material de siembra certificado como libre de enfermedades de transmisión por injerto y vectores, o por otros patógenos de importancia económica. Nos referimos a la enfermedad del Huanglongbing (HLB), el virus de la tristeza de los cítricos (CTV) y al viroide de la exocortis (CEVd), entre otros problemas sanitarios que afectan los cultivos de naranjas, mandarinas, limas ácidas, toronjas y pomelos.
El logro hace parte del convenio suscrito entre el Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, y la Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria, Agrosavia, a través del cual se busca contribuir al manejo integrado del cultivo, mediante la vinculación de las ofertas tecnológicas y otros actores, que permitan apoyar la producción comercial y de subsistencia, frente a los principales problemas fitosanitarios.
La producción del material a partir de la semilla genética fue un proceso que empezó hace más de veinte años, y que permitió, a partir de abril del 2019, iniciar la multiplicación de los portainjertos, el desarrollo en vivero y la injertación de las copas, para la producción de las plantas certificadas en categoría básica, material que está siendo entregado a viveristas de diez departamentos. El trabajo se llevó a cabo en el Centro de Investigación Palmira, de Agrosavia, con el acompañamiento del ICA.
Con esta primera entrega se atenderán viveristas de Caldas, Quindío, Santander y Valle del Cauca, y en el 2021 el mencionado material llegará a viveros de Antioquia, Cundinamarca, Huila, Meta, Risaralda y Tolima. El material vegetal, que no tiene precio de venta, estará disponible para dichos establecimientos, previo cumplimiento de la Resolución de Certificación 12816 del ICA.
Les corresponde ahora a los viveros, conservar dicha semilla básica en estrictas condiciones de confinamiento en casa de malla antipulgón, para evitar su contaminación por insectos vectores, y a partir de estas plantas, empezar su programa de multiplicación en las categorías de registrada o certificada, para así entregarles plantas de cítricos certificadas a los productores.
“La iniciativa proyecta entregar 18 mil plantas de los quince cultivares de cítricos de mayor demanda en el país, para que los viveros establezcan los bloques de fundación que corresponden a la categoría básica, de acuerdo con la norma 12816 del 2019”, dijo Jorge Mario Díaz Luengas, director ejecutivo de Agrosavia.
Por su parte, Deyanira Barrero León, gerente general del ICA, manifestó: “Desde el ICA venimos trabajando con Agrosavia en el proceso de formación de estas plántulas. Vamos a garantizar que estos materiales que acabaron de recibir, van a ser ubicados en unos sitios especiales, en donde van a estar aislados y libres de contaminación. Esto, con el fin de darle una garantía al agricultor de la producción sana y segura que van a obtener, entregándoles herramientas y nuestro acompañamiento para que los productos en un futuro sean competitivos en los mercados internacionales”.
Con la siembra de plantas sanas, libres de patógenos, se puede alcanzar una producción de 15-20% más de fruta de alta calidad, comparado con plantas afectadas por patógenos al momento de la siembra. Para enfrentar el HLB, que puede reducir el rendimiento de los huertos de cítricos hasta en 50%, los países afectados por la enfermedad incluyen como uno de los tres pilares del manejo, establecer, justamente, huertos a partir de material certificado, manejo del vector y erradicación de plantas.
En efecto, una de las principales estrategias de manejo de enfermedades en países productores de cítricos, como Estados Unidos, Brasil y España, entre otros, es la producción de material vegetal sano en ambientes protegidos, modelo que debe ser respaldado bajo normas de certificación.
En Colombia, hay más de 100 mil hectáreas de cítricos sembradas, cuyo material vegetal se multiplica y distribuye a través de viveros que adelantan el proceso a libre exposición, razón por la cual es importante contar con material sano, que cumpla con la normatividad vigente.