Revista Nacional de Agricultura
Edición 1039 – Agosto 2023
El pasado 24 de agosto, la Sociedad de Agricultores y Ganaderos del Valle del Cauca – SAG, cumplió 99 años de haber dado vida a una institución que ha sido y sigue siendo clave para el futuro del sector agropecuario del país. La Revista Nacional de Agricultura invitó a María Eugenia Saavedra, presidenta del gremio, para hablar de los avances y retos del sector en su región.
Revista Nacional de Agricultura: María Eugenia, “unión y trabajo” es lo que ha representado a la SAG Valle desde que nació en 1924. ¿Cuál es la importancia de mantener esos dos factores en el sector agropecuario de Colombia?
María Eugenia Saavedra: Cuando hablamos de la SAG Valle hablamos de todo el sector agropecuario, es decir agricultura, la parte pecuaria, los forestales, acuicultura, la agroindustria, etc. Es alinear los objetivos comunes, fundamental para la subsistencia de estas actividades. Los problemas del sector agropecuario son múltiples, pero es fundamental que todos los agremiados nos alineemos para buscar solución a los inconvenientes que se van presentando en un sector tan diverso como el nuestro. Es donde toma importancia “La Unión y Trabajo”. Nuestro sector es tan diverso como la canasta familiar, así de diverso; por eso es necesario unirnos con organizaciones que tienen intereses afines y líneas de acción comunes; y en situaciones diferentes, pero que se articulan entre sí, cada variable es exigente y nos lleva a buscar la ecuanimidad donde todos podamos ser parte y en condiciones disimiles.
Te pongo como ejemplo el maíz o la soya, debemos mirarlo como cultivo con sus dificultades, pero también como agroindustria, pues son base de concentrados para otras actividades tales como la ganadería, porcicultura, avicultura, acuicultura y demás.
El éxito está en donde logramos consensos a pesar de la diversidad de problemas y situaciones; buscando el crecimiento del sector y sus subsectores, y el mejoramiento de la calidad de vida y bienestar social para los productores agropecuarios.
R.N.A.: ¿Cuáles son hoy las prioridades de la SAG para con los productores de la región?
M.E.S.: Siguen siendo las mismas de hace 99 años, ¡el crecimiento del sector agropecuario y sus subsectores! No tenemos un sector más importante que otro, no concebimos que un sector crezca a costa del sacrificio de otro, es muy complejo el manejo de estas situaciones. Es ser conscientes de que la rentabilidad debe ser para todos aquellos que participan en la cadena de la producción y cada uno es como una ficha de un juego que debe estar articulado, que cuando falta una o crece demasiado una, se desequilibra y se daña el juego; aquí cada uno es importante: productores, insumos, servicios, agroindustria, consumidores, etc. Esta ha sido nuestra tarea, mantener esa ecuanimidad y ese equilibrio. La SAG en este juego trabaja con honestidad, respeto, legalidad, sostenibilidad, buscando el crecimiento del sector, como una gran familia que busca mantenerse unida, desarrollarse y crecer.
R.N.A.: ¿Cuál es la labor de asistencia técnica que presta la SAG para los productores?
M.E.S.: Es un acompañamiento técnico con responsabilidad, brindando herramientas idóneas con criterios de sostenibilidad ambiental, pero sobre todo con calidad humana, donde logramos entendernos como personas, profesionales y productores agropecuarios, para trabajar en el proceso de aprender con base en experiencias exitosas o no, conocimiento y la disposición para sacar adelante metas en beneficio del sector.
Desde el año 2015 venimos prestando el Servicio de Asistencia Técnica Agropecuaria primero como EPSAGRO y ahora como EPSEA. Nos propusimos desde esa época ofrecer un servicio integral que les permitiera a los pequeños productores tener el acompañamiento no solo del extensionista, sino que contara también con el extensionista del área ambiental, del socio empresarial. Fuimos los primeros en llevar a los jurídicos al proceso de extensión agropecuaria en campo, tanto para temas particulares, pero con mayor énfasis en la legalización de sus asociaciones, como para temas de compromisos legales y las responsabilidades frente a la participación en contratos de compraventa, en licitaciones y convocatoria. Esta integralidad ha permitido que, a través de procesos de extensión articulados, frecuentes y con procesos de construcción de confianza, los productores tengan resultados rápidamente y decidan dar el paso al cambio.
Contamos con un equipo de 44 profesionales en todas las áreas que cuentan con el título de Especialización Tecnológica en Gestión de Asistencia Técnica Agropecuaria y que están en procesos continuo de actualización.
R.N.A.: La región, junto al Cauca, está sufriendo una ola de inseguridad que no se había visto en mucho tiempo, ¿cuál es el rol del gremio ante dificultades como estas?
M.E.S.: Apoyamos totalmente la institucionalidad. Nosotros somos un articulador entre los afectados, la fuerza pública, entes municipales y de control.
El tema del conflicto en la región pacífico, motivado por el narcotráfico, las economías ilegales y los cultivos ilícitos son la razón de la inseguridad que se vive. La fuerza pública, policía y Ejército son los llamados a devolver la tranquilidad a la región. Desde el sector agropecuario consideramos que podemos aportar acompañando a los agricultores en la siembra de cultivos lícitos, que no solo provean la rentabilidad de sus cultivos, si no que promuevan el desarrollo digno de las comunidades.
R.N.A.: ¿Qué respuesta les ha dicho el Gobierno que dará ante la situación de inseguridad?
M.E.S.: La fuerza pública siempre ha estado al lado nuestro, razón por la cual tenemos un gran aprecio por su labor y somos coequiperos con ellos para que se aclimate la tranquilidad y el bienestar de la región.
R.N.A: A propósito de eso, ¿cuáles son los retos que enfrentan hoy los productores representados por la SAG?
M.E.S.: ¡Mejorar la productiva del sector! Las actividades productivas no solo necesitan ser viables, sino rentables, de manera que atraiga a las nuevas generaciones y sea una opción real de futuro.
También, ¡el intercambio generacional! Evitar la despoblación y el desmantelamiento rural.
¡La seguridad! Que se pueda recorrer el campo sin temor a secuestros, vacunas, robos, el tema de las invasiones y la defensa de la propiedad privada; por supuesto la Seguridad Jurídica.
¡El agua como recurso natural y elemento primordial para la producción agropecuaria! Importante trabajar en el sector agropecuario articulando temas de Herramientas de Manejo del Paisaje asociados a la actividad productiva, favoreciendo la biodiversidad y el equilibrio ecológico.
¡La infraestructura vial y de servicios para el agro! El rezago tecnológico, la falta de asistencia técnica integral y continua, la infraestructura no solo vial, sino también para la postcosecha, de riego, la conectividad digital y de información.
¡Los canales de comercialización! Promover esquemas de inserción de los productos de musáceas en cadenas de valor más amplias, incluida la exportación, para aumentar los ingresos y la competitividad de los productores locales.
¡Préstamos acordes a la producción agropecuaria!
¡El cambio climático! Desarrollar estrategias de adaptación al cambio climático para proteger la producción agropecuaria de eventos climáticos extremos.
¡Fomento de la innovación! La investigación y el desarrollo son elementos esenciales para la mejora continua del sector primario. Es necesario invertir en tecnologías y prácticas sostenibles que maximicen el rendimiento, reduzcan los residuos y minimicen el impacto ambiental.
R.N.A.: Su rol de mujer como líder del gremio debe ser muy inspiradora para las mujeres productoras a las que representan, ¿Qué cree que se ha conquistado y qué falta para las mujeres en el sector?
M.E.S.: Dignificar a la mujer como empresaria agropecuaria, con liderazgo y como baluarte fundamental del desarrollo del sector y de la familia agropecuaria productiva.
Las mujeres en el campo somos el soporte ideológico, racional, la que planifica, registra y apoya al productor y a sus hijos para conseguir resultados en sus núcleos productivos.
Otras mujeres son extensionistas, logramos motivar a otras profesionales de diferentes disciplinas a entrar a trabajar en el sector agropecuario; ¡pero en campo! Logrando respeto y credibilidad en el ejercicio de sus profesiones. De hecho, el 60% del equipo de trabajo SAG Valle son mujeres.