Revista Nacional de Agricultura
Edición 1044 – Febrero 2024
El 2024 inició con la alerta preocupante del Gobierno Nacional y del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales, Ideam, para más de 700 municipios en el país con amenaza de incendios forestales derivados de las altas temperaturas propias del fenómeno de El Niño y, por otro lado, el riesgo de desabastecimiento hídrico que dificulte a su vez la producción de alimentos.
La RNA habló sobre el panorama climático para este año con la directora del Ideam, Ghisliane Echeverry, quien estuvo como invitada el pasado 31 de enero a la Junta Directiva de la SAC; un espacio que sirvió para tender puentes de comunicación e información oportuna que ayuden al sector agropecuario a tomar medidas preventivas ante los extremos climáticos.
Revista Nacional de Agricultura (R.N.A.): Desde el 2023 se viene hablando del inminente impacto del fenómeno de El Niño y la Organización Meteorológica Mundial (OMM) confirmó que fue el año más caliente del que se tiene registro. Hablemos primero de las características de ese fenómeno, directora.
Ghisliane Echeverry Prieto (G.E.P): El Niño es un fenómeno meteorológico de escala global que se manifiesta en el océano y en la atmósfera y ocurre por el calentamiento del océano Pacífico, tanto de las aguas superficiales como de las aguas subterráneas. Esta anomalía tiene impactos diferenciales en las regiones, es decir, no son los mismos impactos los que puede tener sobre Colombia que sobre Ecuador, entonces es importante saber que para nuestro país el fenómeno de El Niño tiene unos impactos sobre la temperatura; hay disminución de la precipitación y aumento de temperatura.
R.N.A.: Pero, ¿eso no significa que dejará de llover, verdad?
G.E.P.: No, el fenómeno de El Niño no significa ausencia absoluta de lluvias; es un fenómeno recurrente, cíclico, que se puede ver cada dos a siete años y lo que hace es que en general el promedio de la precipitación va a disminuir. Pero cuando medimos esa cantidad de precipitación al mes, los promedios están por debajo de lo normal para la época.
R.N.A.: El Ideam emitió alertas desde principios del año de varias regiones del país donde será descomunal el aumento de temperatura, ¿Cuáles son esas regiones?
G.E.P.: En este momento tenemos el inicio de la temporada seca en regiones como Caribe, Andina y Orinoquía. Esa temporada seca unida a este aumento de temperaturas que venimos registrando desde el año pasado, está generando unas condiciones para varias cosas, entre ellas, las alertas tanto de temperaturas como de amenaza por incendio.
R.N.A.: Dentro de esa alerta que ustedes emitieron, directora, hablaron de un incremento del 390% en el número de municipios que están amenazados por incendios. ¿A qué se debe ese aumento abrupto en las zonas amenazadas? ¿El Niño llegó más fuerte de lo que se esperaba?
G.E.P.: Es importante aclarar que en meteorología los fenómenos no son excluyentes; el hecho de que estemos en fenómeno de El Niño no significa que no puedan ocurrir otras cosas en el territorio nacional (…) Todo está confluyendo al mismo tiempo y esto se traduce en aumento de temperatura, en disminución de la precipitación, y por supuesto en las subsecuentes alertas que esto puede generar. Ya iniciado el 2024 exactamente cuadruplicamos la cifra de municipios en alerta y esa cifra se ha sostenido más o menos durante toda la [primera] semana [del año].
Nuestro país, así como es diverso en flora, en fauna, también en meteorología debido a nuestra geografía y topografía, por eso tenemos en este momento la región del Pacífico en otra situación de contrastante y es que están concentrados los municipios de alertas por deslizamiento, pues la región pacífica es una de las más lluviosas del mundo. Por esta lluvia sostenida hay sobresaturación del suelo y tenemos alertas de deslizamiento.
R.N.A.: Y si bien esas alertas tempranas son tan importantes, ¿Qué acciones para prevenir esos extremos climáticos han funcionado en Colombia o en otros países y que podrían ser ejemplo para nosotros?
G.E.P.: En Colombia se adelantan varias acciones al respecto. Tenemos compromisos internacionales para disminuir esa emisión de gases de efecto invernadero (GEI) y somos el país de Latinoamérica con la meta más ambiciosa de reducción de GEI. Esa meta y esos compromisos hacen que se desplieguen una serie de acciones alrededor de ese cumplimiento que tienen que ver con la articulación sectorial con muchas acciones en territorio y sobre todo, con el trabajo conjunto con los sectores privados y con las comunidades.
Con relación al fenómeno de El Niño, el Ideam informó al país el 8 de junio de 2023, cuando emitimos un comunicado, que las condiciones de El Niño se encontraban presentes y desde ese momento el Gobierno Nacional inició un despliegue de preparación. De hecho el decreto de La Guajira es el primer decreto en la historia del país de línea preventiva en el marco de la crisis climática y el fenómeno de El Niño, y desde allí se derivó para todo el país algo que se llama la Gerencia del fenómeno de El Niño, donde confluyen todos los sectores gubernamentales y cada sector ha generado una hoja de ruta y un plan de atención para las alertas que se puedan generar dentro del marco de este fenómeno meteorológico.
(…) Pero además hay una apuesta muy grande de Gobierno, contestando la pregunta, y es dejar capacidades instaladas porque esto no va a suceder solamente ahorita en enero, febrero y en marzo; si seguimos en esta tendencia de años calientes, las temporadas de sequía las vamos a tener cada año, entonces el país está en línea de generar capacidades estructurales que permitan responder, atender, prevenir y mitigar este tipo de escenarios climáticos.
R.N.A.: Ya que mencionó la Gerencia del fenómeno de El Niño, hay otra instancia muy importante para nuestro sector como las Mesas Técnicas Agroclimáticas. ¿Puede explicarnos cómo funcionan y cuál es el rol del Ideam en ellas?
G.E.P.: Las MTA están lideradas por el ministerio de Agricultura pero convocan a diferentes sectores y actores como el ministerio de Ambiente, la FAO, el CIAT y otras organizaciones. Estas mesas realmente son un escenario muy interesante de articulación intersectorial, es una manera de complementar la información y los esfuerzos que hacemos desde los diferentes entes e instituciones. Estas se reúnen mensualmente por región y una a nivel nacional.
El rol del Ideam allí es generar o entregar esa información de pronósticos y de predicciones climáticas. Esa información se apropia por los diferentes sectores y la llevan a sus contextos y se toman acciones. Es una de las líneas claves de la mesa la planificación a partir de esos pronósticos y predicciones.
R.N.A.: ¿Cómo estamos en disponibilidad de agua?
G.E.P.: Cada 4 años se genera el Estudio Nacional del Agua que es la base de información justamente para poder tomar acciones y para saber qué puede ocurrir en un año seco. Esa información ha identificado más de 200 municipios como susceptibles a desabastecimiento y también allí hemos hecho algo que se llama el índice Potencial de la Calidad de del Agua; lo que nos da es una capa base de información que se ha compartido con todas las carteras del Gobierno.
R.N.A.: Hablemos del proyecto ENANDES que tiene el Ideam con la OMM.
G.E.P.: Es un proyecto bandera maravilloso que viene funcionando hace un par de años y hace parte de un proceso de paz entre comunidades indígenas y campesinas en algunas cuencas en el Cauca, muy cerca a Popayán. Este proyecto actualmente tiene vinculadas a comunidades campesinas, indígenas pero también a Juntas de Acción Comunal y más de 10 instituciones educativas, algunas con educación étnica y otras instituciones públicas.
De manera general lo que se hace allí es que tenemos un equipo en territorio que está en constante comunicación con las comunidades y se hacen Mesas Agroclimáticas, se convoca una vez al mes, las comunidades llevan toda la información o el seguimiento que ellos han hecho y se crearon unos formatos en conjunto con estas comunidades, para que podamos identificar riesgos. El Ideam lleva la información de pronósticos, pero no es el Ideam capacitando o el único protagonista, sino que es un diálogo de saberes, es información desde la experiencia del territorio, desde el conocimiento de quienes están viviendo día a día lo que está ocurriendo, y la información técnica y científica que llega al Instituto se complementa de allí. Se genera un consolidado y se planifican en conjunto. Esto ha mejorado muchísimo la economía local.
R.N.A.: Finalmente, directora, ¿qué tan avanzados estamos en tecnología para la precisión de la información de esos pronósticos del Ideam?
G.E.P.: Desde la creación del Ideam, la mayoría de los datos se tomaban de manera manual a través de estaciones convencionales y esto obviamente ha ido cambiando y hemos ido migrando hacia estaciones automáticas, entonces la cantidad de datos que podíamos tomar en 10 años hoy la tomamos en una semana porque las estaciones automáticas la generan mucho más rápido.
También ha ido creciendo nuestra red. Nosotros tenemos más de 2.600 estaciones hidrometeorológicas en todo el territorio nacional, algunas de ellas convencionales otras automáticas y todo el tiempo se está generando información.
Pero además, desde hace 13 o 14 años iniciamos con el sistema de monitoreo de bosques y carbono que se hace a través de imágenes satelitales, y eso también tiene un peso a nivel de informática. La demanda de información del instituto ha crecido exponencialmente en los últimos años y va a seguir creciendo.
Sabemos que el tema ambiental cada vez demanda más y genera más atención y el Instituto no lograba ir a la par de esa demanda y tiene todavía un rezago tecnológico importante. Sin embargo, en el Ideam se han construido capacidades técnicas y científicas muy valiosas, y el equipo en términos de procesamiento de información para generar pronósticos confiables.
Nota: Vea la entrevista completa de la SAC a la directora del Ideam en el canal de YouTube de la Sociedad de Agricultores de Colombia, programa Es el momento del campo.