Una mujer preside ahora la BMC

Es grande el papel que va a desempeñar esta institución en la recuperación del aparato productivo nacional. Entrevista con María Inés Agudelo Valencia.

Por primera vez en la historia de la Bolsa Mercantil de Colombia, BMC, una mujer ha llegado a presidirla. Se trata de María Inés Agudelo Valencia, economista de la Universidad de los Andes, gran conocedora de la institución, puesto que por más de tres años hizo parte de su junta directiva. Remplaza a Rafael Mejía López.

Agudelo Valencia tiene una maestría en Ciencias Económicas de la Universidad de Londres, Birkbeck College, y estudios de doctorado en Economía de la misma universidad. Fue viceministra técnica en la cartera de Hacienda, miembro de las juntas directivas del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional, directora de Fondo de Garantías de Instituciones Financieras, Fogafin, e investigadora asociada de Fedesarrollo.

Según se ha mencionado, entre los retos más importantes que enfrentará la nueva presidenta de la BMC están “consolidar los objetivos y culminar la implementación de los modelos operativo y digital, y perseverar la construcción de una cultura de alto desempeño para fortalecer la oferta de valor al cliente, innovando en los mercados administrados”.

Revista Nacional de Agricultura: ¿Cómo encontró a la BMC y cuál es la estrategia de negocio?

Inés Agudelo Valencia: La BMC es una organización única en Colombia, enfocada a crear y desarrollar mercados eficientes, seguros y transparentes, y a apalancar el desarrollo de empresas, mediante financiación no bancaria, a través de información, conocimiento y tecnología. Ese es nuestro foco, y por tanto nuestra estrategia de negocio es seguir profundizando en esto.

R.N.A.: ¿La pandemia originada por el covid-19 cómo ha afectado a la BMC? 

I.A.V.: La BMC está desempeñando un rol fundamental para enfrentar los efectos de la pandemia. Al ser una plataforma que facilita la financiación no bancaria, que no afecta el endeudamiento de las empresas, se convierte en una fuente ideal para el financiamiento en esta época de restricción de recursos.

En este momento, los proveedores de los gobiernos que pasan por nuestro mercado de compras públicas pueden acceder muy fácilmente a este tipo de financiación. También tenemos la opción de encontrar financiamiento para el sector agropecuario al ofrecer “repos” sobre los certificados de depósitos de mercancía.

Adicionalmente, como respuesta a las necesidades originadas en el covid-19, profundizamos y agilizamos el mercado de compras públicas de la BMC. Este es un mecanismo que cuenta con muchos años de experiencia, en el cual las entidades públicas encuentran un escenario ideal para suplir sus necesidades con transparencia y eficiencia. En respuesta a las necesidades actuales, lanzamos un mecanismo exprés, mediante el cual el proceso de contratación se puede hacer entre cuatro y siete días.

Como tenemos cobertura nacional,  podemos soportar la contratación que requieran los entes territoriales de todo el país. Nuestro mecanismo cuida los recursos públicos.

También somos gestores del mercado de gas natural, lo que nos convierte en fuente de información confiable e independiente. Estamos desempeñando un papel muy importante para el gobierno nacional, la Comisión de Regulación de Energía y Gas, Creg, y los agentes del mercado, al proveer información precisa y oportuna. Esto se refleja en la publicación de informes diarios y semanales que presentan las dinámicas de producción y consumo de gas natural.

R.N.A. :¿Cuál debería ser la contribución pospandemia de la BMC a la recuperación del aparato productivo nacional?

I.A.V.: Como soporte para el desarrollo de los mercados y fuente de crecimiento para las empresas, tenemos mucho para contribuir a la recuperación del aparato productivo.

Por una parte, facilitamos la financiación no bancaria, mediante productos competitivos, como los “repos”, a través de los cuales las empresas pueden obtener financiación respaldada por su propio inventario; las Órdenes Irrevocables de Giro (OIG), que son una fuente de financiación para los proveedores del Estado, o mediante el registro de facturas, que provee liquidez a las empresas al diferir el pago de la retención en la fuente para el periodo siguiente. Es financiación para las empresas que no afecta su nivel de endeudamiento.

De otra parte, el Mercado de Compras Públicas (MCP) se convierte en un gran dinamizador de las economías regionales, al permitir que proveedores pequeños y medianos puedan vender en sus propios territorios a los gobiernos locales.

Adicionalmente, nuestra plataforma de negociación está habilitada para que las empresas del sector privado realicen sus compras y ventas de bienes y servicios, mediante un mecanismo transparente y eficiente, que garantiza precios de mercado. Esto se traduce en menores costos y constituye una buena práctica empresarial en el caso de que las empresas decidan utilizar la plataforma para realizar sus compras o lo institucionalicen como un nuevo canal de comercialización para la venta de sus productos.

R.N.A.: ¿Qué encuentran los alcaldes y gobernadores en la BMC?

I.A.V.: Los alcaldes y gobernadores encuentran en la BMC a un aliado para el cuidado de los recursos públicos y para la contratación transparente y segura de bienes, productos y servicios de calidad y a precios de mercado. 

R.N.A.: ¿Económicamente, como está la BMC?

I.A.V.: Bien. La BMC es una empresa sólida. Somos una empresa en la lista de la Bolsa de Valores de Colombia, BVC, y estamos comprometidos con la generación de valor para todos nuestros accionistas y grupos de interés. Durante el 2019, crecimos 24%, lo cual contribuyó a fortalecer nuestra situación financiera y nos deja en muy buena posición para afrontar la coyuntura actual y seguir fortaleciendo nuestra propuesta de valor.

R.N.A.: ¿Con cuántos productos trabaja hoy la BMC? ¿Hay que ampliar ese portafolio?

I.A.V.: Nuestra estrategia de negocio es ser creadores de mercados eficientes y proveedores de financiación no bancaria. Estamos trabajando en profundizar ambos ejes y esto pasa por la profundización y ampliación de cada uno de nuestros productos.

R.N.A.: ¿Cuáles son productos los que muestran mayor movimiento?

I.A.V.: Por un lado, el registro de facturas para el sector agropecuario es un servicio que tiene gran movimiento, pues les permite optimizar los flujos de caja a las empresas. Nos gustaría poder ampliar esto a otros sectores, ya que en situaciones como las actuales es una alternativa interesante de financiación para las empresas.

Por otra parte, el mercado de compras públicas tiene bastante movimiento, pues el gobierno central y los entes territoriales ven en la BMC una aliada para adelantar procesos de contratación eficientes, transparentes y basados en criterios técnicos. Nos ven como un aliado para el cuidado de los recursos públicos.

Así mismo, queremos ampliar nuestra participación en los mercados energéticos, pues como lo hemos demostrado en estos años como gestores del mercado del gas natural, somos un operador confiable y fuente de información independiente.

R.N.A.: ¿Cuál es su diagnóstico de las compras públicas y qué se propone hacer en este frente?

I.A.V.: Nuestro propósito es y siempre ha sido, ser un aliado del gobierno nacional y de los gobiernos locales para crear un mercado de contratación pública transparente, eficiente y confiable. En este sentido, somos un complemento de Colombia Compra Eficiente.

Pero además de nuestra plataforma de negociación, ofrecemos productos como las OIG, que son una fuente de financiación para los proveedores de los gobiernos. Ahora lo que queremos lograr es que no solo los proveedores que negocian a través de la plataforma del mercado de compras públicas de la BMC se beneficien de esta financiación, sino ampliarlo a los proveedores que participan en las negociaciones de Colombia Compra Eficiente. Queremos que todos los proveedores del sector público tengan en la BMC una plataforma para su financiación.

R.N.A.: Usted ha mencionado varias veces las OIG, cuéntenos un poco más sobre estas

I.A.V.: Las Órdenes Irrevocables de Giro (OIG) son un producto que se desarrolló en la BMC hace unos años para asegurar la fuente de pago a los financiadores. Lo atractivo de este instrumento es que el servicio de compensación y liquidación de la BMC le da la seguridad al que presta la plata, de que en el momento en que la entidad pública le paga al proveedor por los bienes o servicios prestados, este recibe lo correspondiente a su crédito y al costo de la financiación. Es una forma atractiva de invertir recursos de manera segura.

R.N.A.: Usted se propone sacar adelante un modelo de ventas y compras para el sector privado. ¿En qué consiste?

I.A.V.: Queremos capitalizar lo aprendido en el mercado de compras públicas y ofrecer a los privados el mismo servicio de compras, a través de mercados eficientes y transparentes. En este sentido, queremos llevar toda nuestra experiencia, conocimiento y nuestra plataforma de negociación para que las empresas privadas puedan vender y comprar a través nuestro. Como lo hacemos con los proveedores públicos, nosotros podemos asesorar técnicamente en la estructuración de los procesos para la venta de bienes y servicios. Facilitamos la apertura de un nuevo canal de comercialización y el que tengan una gran vitrina para que expongan sus productos.

Para los compradores, ponemos a disposición nuestra rueda de negocios, que promueve la participación de varios oferentes y, por lo tanto, se garantizan precios de mercado al generarse una puja entre los participantes. Nuestros mecanismos de compensación y liquidación son garantía para las empresas en que el producto y el servicio les llegará con las especificaciones establecidas.

Podemos llegar a ser un aliado importante para que las empresas puedan vender y comprar bienes y servicios de manera segura, eficiente y transparente, siendo la única bolsa de productos con un sistema de compensación y liquidación que garantiza acreditaciones, recibos y pagos, acompañando la operación de principio a fin, y que además de administrar el mecanismo especial de garantías también maneja el de resolución de conflictos, siendo en ambos efectivos y competitivos.

R.N.A.: ¿Los gremios del sector agropecuario desempeñarían algún papel?

I.A.V.: Por supuesto. El papel de los gremios es fundamental, más ahora que nos debemos unir para juntos trabajar por la dinamización de las empresas y de su cadena productiva. Como lo mencioné, a través de la BMC se posibilita la apertura de nuevos canales de comercialización para las empresas, tanto en el mercado de privados como en el de públicos. En la BMC se han transado en los últimos años bienes y servicios por $7.8 billones, de los cuales $1.6 billones se negociaron el año pasado.

Así mismo, las empresas y las entidades estatales, pueden optimizar sus costos en la adquisición de bienes y servicios, gracias a los ahorros económicos que se logran en las pujas y en las eficiencias administrativas que se obtienen.

R.N.A.: ¿Tiene planes para el área de registro de facturas?

I.A.V.: Este producto está habilitado por el momento únicamente para el sector agropecuario, y es, por lo tanto, una importante fuente de liquidez y financiación para sus empresas.  Para darle la magnitud de esta fuente de financiación y mostrar la diversidad de productos, anualmente en la BMC el agro registra $30 billones de pesos en facturas distribuidas así: Cereales, 16%; ganadero, 14%; balanceados, 12%; aceites y grasas, 11%; azúcar, 9%; avícola, 5%; café, 4%; porcino, 4%; productos lácteos, 3%; huevos 3%; productos de molinería, 3%; preparaciones y conservas. 2%, y otros, 15%.

Nuestra idea es que este producto se amplíe a otros sectores para que también puedan beneficiarse de la liquidez que este provee, como, por ejemplo, el sector agroindustrial, máxime en una coyuntura como la que estamos viviendo, pues sería una gran ayuda para todo el sector productivo del país.

R.N.A.: ¿Cómo le ha ido a la BMC en el negocio del mercado financiero? ¿Su administración se propone hacer alguna intervención en este frente?

I.A.V.: Sí. Como le comenté, nuestro foco es fortalecernos como proveedores de financiación no bancaria. Las operaciones “repos” han ido creciendo y vemos que en esta coyuntura son un mecanismo de financiación muy importante para el sector.

En los últimos años se han transado más de $400.000 millones en subyacentes como fibra de algodón en transformación, cerdo en pie, azúcar, arroz cáscara nacional (seco y blanco), leche en polvo, pollo congelado, aceite crudo de palma, aceite crudo de palmiste y pulpa de mango, entre otros. En este frente, bajo mi administración se está trabajando en la habilitación de nuevos subyacentes, con el fin de que podamos ser un complemento a la financiación bancaria, más ahora que la necesidad de financiación de las empresas se está incrementando.

R.N.A.: ¿Desde el punto de vista tecnológico, que mejoras necesita la BMC?

I.A.V.: Qué bueno que me lo pregunta. Estamos trabajando en todo un plan de transformación digital, el cual vamos a iniciar su implementación en lo que resta del año. Esta transformación digital está alineada con nuestra estrategia de negocio para soportar y apoyar nuestros objetivos en materia de creación de mercados y financiación no bancaria.

R.N.A.: Finalmente, ¿cuáles son los alcances del contrato recientemente suscrito entre la BMC y el Minagricultura por $60.000 millones?

I.A.V.: Apoyar a esta cartera con el desarrollo y ejecución de las actividades que promuevan el fortalecimiento del sector, para garantizar que los recursos les lleguen a los destinatarios del agro que el gobierno considera deben ser atendidos. Además, busca garantizar el nivel de precios, a través de esquemas de coberturas, la continuidad de los productores en la actividad productiva, fomentar la transformación de materias primas mediante el acceso a kits de herramientas e insumos, fortalecer la comercialización y abastecimiento de productos a través de apoyos al transporte o incentivos al almacenamiento.

En concreto, los programas para ejecutar son: apoyo a la toma de coberturas de precio y tasa de cambio para maíz; continuidad de los programas de laboratorios de calidad y monitoreo de inventarios de arroz; incentivo a la competitividad de la actividad pesquera; apoyo a la logística de transporte para la comercialización de alimentos perecederos en el marco de la pandemia; apoyo a la producción agropecuaria, a través de la entrega de insumos y elementos para la protección de la salud de productores agropecuarios; apoyo a la formulación y perfeccionamiento de mecanismos de estabilización de los precios en la comercialización, y programa de promoción al consumo.

R.N.A.: ¿Cómo operará, cuándo comenzará y cuándo finalizará?

I.A.V.: La operación de estos programas se da en atención a algunos actos administrativos que expide el Ministerio de Agricultura. En este momento, estamos trabajando en el apoyo al transporte de alimentos perecederos. En la página web de la BMC estaremos publicando oportunamente, cada uno de los programas con sus alcances y condiciones una vez esté próximo el inicio de su operación. Respecto a programas, como, por ejemplo, la toma de coberturas, es importante tener en cuenta que su inicio depende de los ciclos productivos de los cultivos que atenderán. La finalización del contrato está prevista para el 31 de diciembre del presente año.