Revista Nacional de Agricultura
Edición 1003 – Mayo 2020

El país necesita tecnologías mejoradas para ayudar a los agricultores a cultivar una amplia gama de cultivos de alta calidad. Entrevista de María Isabel Díaz.

Una investigación desarrollada por la Unidad de Inteligencia deThe Economist, con el apoyo de Corteva Agriscience, revela una noticia positiva para Colombia. Nuestro país avanzó ocho puestos en el Índice Global de Seguridad Alimentaria, GFSI (por sus siglas en inglés), que mide ciento trece países a través de veintiocho variables.

Hablamos con Corteva Agriscience sobre este índice, que se ha convertido en referente para la formulación de políticas y en una herramienta de diagnóstico de inversión para los países.

Revista Nacional de Agricultura: ¿Qué es el índice de Seguridad alimentaria y cómo se mide?

Corteva Agriscience: Es una importante herramienta de valoración, desarrollada por la Unidad de Inteligencia de The Economist, con el apoyo de Corteva Agriscience, que orienta las decisiones que transforman la manera como alimentamos al mundo, al destacar las fortalezas y los desafíos de los sistemas alimentarios a escala global.

El GFSI evalúa a ciento trece países, a través de veintiocho variables, en función de la asequibilidad, disponibilidad, calidad y su capacidad de respuesta a los riesgos relacionados con los recursos naturales; además, constata que casi todos los países cuentan con una oferta de alimentos lo suficientemente amplia para satisfacer las necesidades de su población. Desde sus inicios en el 2012, se ha convertido en un referente para la formulación de políticas por parte de los gobiernos y una herramienta de diagnóstico de inversión para los países.

R.N.A.: ¿Cuál es el país con mayor seguridad alimentaria en el Índice Global, y qué aspectos se pueden destacar?

C.A.: Singapur ocupa el primer lugar del ranking. Es un país que ha demostrado eficiencia en el costo de los alimentos necesarios para satisfacer a la población con relación a los ingresos, cuenta con una oferta suficiente de alimentos y de manera constante, que responde a las exigencias de producción y de comercio, y logra una alta valoración en cuanto a calidad y seguridad de los alimentos que van al consumidor. Lo anterior, sumado a su capacidad de respuesta para atender los riesgos relacionados con la crisis climática y el agotamiento de los recursos naturales.

R.N.A.: ¿Cómo está América Latina en términos de seguridad alimentaria?

C.A.: Chile se encuentra a la cabeza, con la posición 25, seguido por Uruguay (33), Argentina (37), Brasil (39), Costa Rica (39), Colombia y México (43). Nicaragua (-4 puntos), tiene el mayor descenso en el puntaje, entre el 2018 y el 2019, seguido por Argentina (-2 puntos), como resultado del deterioro de los sistemas alimentarios, la inestabilidad  política continua y los conflictos.

Por otra parte, Venezuela se ubica como el país más bajo de la región y de la medición (113), pues los precios promedio de los alimentos se triplicaron, carece de fondos consistentes para los programas de redes de seguridad alimentaria –dejando en riesgo a los hogares vulnerables–, y es el único país de la región que obtuvo cero en el acceso financiero para los agricultores, lo que dificulta la productividad agrícola.

R.N.A.: ¿Cuáles fueron los parámetros que le permitieron a Colombia subir ocho puestos en el Índice Global de Seguridad alimentaria?

C.A.: Colombia presenta fortalezas en presencia y calidad de los programas de seguridad alimentaria, estándares nutricionales, costo promedio de alimentos, proporción de población bajo la línea de pobreza global, desperdicio de alimentos, volatilidad en la producción agrícola y diversidad de dieta.

R.N.A.: ¿Qué medidas deben implementarse en Colombia si queremos seguir subiendo en el Índice Global de Seguridad Alimentaria?

C.A.: Antes que nada, es importante mencionar que el GFSI brinda información valiosa al identificar hacia dónde se deberían dirigir los recursos y experiencia para alimentar a la población, enriquecer a las comunidades y sostener el planeta.

En el caso de Colombia, existe una necesidad de tecnologías mejoradas para ayudar a los agricultores a cultivar una amplia gama de cultivos de alta calidad, así como un mayor acceso a la educación para garantizar una producción de alimentos estable y sostenible para mitigar los efectos del cambio climático.

Al profundizar en otras variables que son fundamentales para aumentar la capacidad alimentaria del país, en función de asequibilidad, disponibilidad y calidad de los alimentos, encontramos que la innovación juega un papel vital. Tanto gobierno como empresarios necesitamos usar la ciencia y la tecnología para crear nuevas maneras de cultivar, procesar y distribuir que permitan garantizar la seguridad alimentaria.

R.N.A.: ¿Cuáles son los principales desafíos que deben asumir los países para garantizar la seguridad alimentaria?

C.A.: Basados en los resultados del estudio, garantizar que los alimentos sean asequibles, pues más de 20% de la población, en casi una cuarta parte de los países, se sitúa por debajo del umbral de pobreza mundial para los países de ingresos medios-bajos.

En segundo lugar, alimentos disponibles en cantidades suficientes para la población y, tercero, satisfacer las necesidades alimenticias ya que existen vacíos en la oferta mundial de vitaminas y minerales esenciales.

R.N.A.: ¿Qué medidas deberían tomarse para que la pandemia tenga el menor impacto en cuanto a seguridad alimentaria en la región?

C.A.: Los sistemas alimentarios, hoy más que nunca, deben ser resilientes para responder a la nueva realidad. A medida que la pandemia de coronavirus amenaza con duplicar el número de personas hambrientas en todo el mundo y la crisis climática continúa limitando la producción de alimentos, la innovación juega un papel fundamental.

El GFSI ofrece una visión única de las fortalezas y los desafíos que enfrentan actualmente los sistemas alimentarios y, al hacerlo, sirve como una herramienta invaluable para guiar las decisiones estratégicas y prácticas que transforman la manera en que alimentamos al mundo. Es por eso que garantizar la disponibilidad y el abastecimiento de alimentos se convierte en el principal reto bajo la coyuntura actual de la pandemia.

R.N.A.: ¿Cómo mantener el equilibrio entre un buen Índice Global de Seguridad Alimentaria y el cuidado y protección de recursos naturales?

C.A.: La dinámica está cambiando y la innovación dentro del sector alimentario tiene el potencial de promover vías para transformar la forma como se producen, transportan y consumen los alimentos, minimizando y, en algunos casos, incluso, protegiendo contra los riesgos ambientales.

¿Qué es el Índice Global de Seguridad Alimentaria?

El Índice Global de Seguridad Alimentaria es una valoración integral del estado de la seguridad alimentaria mundial. El Índice no se limita simplemente a la medición del hambre y abarca los factores subyacentes que impulsan la inseguridad alimentaria en tres dimensiones establecidas a nivel internacional:

ASEQUIBILIDAD

¿Las personas cuentan con fondos económicos suficientes para acceder a los alimentos?

DISPONIBILIDAD

¿Las personas cuentan con acceso físico a suficientes alimentos?

CALIDAD Y SEGURIDAD

¿Se satisfacen las necesidades nutricionales y dietéticas de las personas para garantizar una vida activa y saludable?

Los recursos naturales y la resiliencia

¿Qué capacidad de respuesta tiene el sistema alimentario ante los riesgos climáticos y los causados a los recursos naturales?

  1. DEFORESTACIÓN
  2. URBANIZACIÓN
  3. INUNDACIONES

¿Por qué es importante el Índice Global de Seguridad Alimentaria?

El Índice Global de Seguridad Alimentaria constata que casi todos los países cuentan con una oferta de alimentos lo suficientemente amplia para satisfacer las necesidades de su población.

88% de los países en el índice informan que cuentan con suficiente oferta de alimentos disponible en el país

Sin embargo, en más de un tercio de los países

10% o una cantidad mayor de la población está desnutrida.

La disponibilidad de alimentos por sí sola no es suficiente para resolver los problemas del hambre en el mundo. El GFSI es una herramienta invaluable que orienta las decisiones que transforman la forma en que alimentamos al mundo, al destacar las fortalezas y los desafíos de los sistemas alimentarios en todo el mundo.

¿Cuáles son los principales desafíos para garantizar la seguridad alimentaria?

La seguridad alimentaria es un tema complejo y multidimensional. Para garantizar la seguridad alimentaria ahora y en el futuro, los países deben ..

Garantizar que los alimentos sean asequibles …

Más del 20% de la población, en casi una cuarta parte de los países, se sitúa por debajo del umbral de pobreza mundial, para los países de ingresos medios-bajos.

Disponibles en cantidades suficientes para su población …

La infraestructura agrícola para producir y transportar los alimentos tiene rezagos en países sin litoral marítimo, de bajos ingresos y subsaharianos.

Y satisfacer sus necesidades alimenticias. …

Existen vacíos en la oferta mundial de vitaminas y minerales esenciales.

Solo la mitad de los países actualizaron recientemente las directrices nacionales para una dieta saludable con una guía visual.

¿Cuáles son los principales riesgos relacionados con los recursos naturales y la capacidad de respuesta que pueden representar una amenaza?

Los sistemas alimentarios son altamente susceptibles a los impactos del cambio climático y a los riesgos que amenazan los  recursos naturales. Estos riesgos incluyen:

Exposición

Agua

Tierra

Océanos

Sensibilidad

Adaptabilidad

Demografía

Fuente: The Economist INTELLIGENCE UNIT