Para la firma Mintel éstas serán las cinco tendencias del futuro próximo en materia de empaques para alimentos. Estudio Global Packaging Trends 2018
- Packaging con conciencia
- Experiencia del empaque en e-commerce
- Clean Label 2.0
- Cambio en la conciencia del consumidor sobre la contaminación
- Packaging y el tráfico en los puntos de venta
Para la firma Mintel éstas serán las cinco tendencias del futuro próximo en materia de empaques para alimentos. Estudio Global Packaging Trends 2018
1.-Packaging con conciencia : Dotar al packaging de conciencia y hacer ver que las cajas, embalajes y demás no son simplemente basura. La reducción de la cultura de tirar y desperdiciar alimentos está llevando a que se considere al envasado como una herramienta vital para evitar esta práctica.
La idea de que los empaques son un residuo innecesario del que tienen que deshacerse está empezando a cambiar debido a que los consumidores comienzan a ver que los envases inteligentes amplían la vida útil de los alimentos. Las marcas empezaran a proporcionar herramientas de información para el consumidor sobre los beneficios del packaging y sobre cómo este ayuda a ser más eficientes.
2.-Experiencia del empaque en e-commerce: Los especialistas consideran que el e-commerce no termina su proceso de venta hasta que el empaque llega a manos de sus consumidores. El cómo se presenta el producto y cómo llega a casa es crucial, porque ese packaging será al final el que genere la primera impresión real.
Las compañías e-commerce se preocuparán por el “designing packaging” -el diseño de empaques para venta online-, y en el “transit packaging”, empaque en tránsito que es el que el repartidor lleva a manos de los compradores. Ambas deberán cumplir las expectativas del consumidor.
3.-Clean Label 2.0: Las marcas encontraran el equilibrio entre un punto y otro y podrán conseguir que los consumidores se sientan más cómodos al hacer compras y no confundirlos con tanta información.
Las marcas deben llevar la próxima generación de “etiquetas limpias” al diseño de empaques para proporcionar un momento de calma y claridad para los compradores en un entorno minorista cada vez más agitado.
4.-Cambio en la conciencia del consumidor sobre la contaminación: Con los océanos llenos de envases de plástico, las marcas y las empresas están empezando a tomar conciencia de cómo pueden actuar para revertir este problema.
Se apostará por modelos más ligados a los principios de la economía circular, en los que el packaging será un elemento siempre en uso: “Si bien recolectar plástico residual del mar para reciclarlo en un nuevo embalaje puede aumentar la conciencia del consumidor, no resolverá el problema”, detalla el estudio.
5.-Packaging y el tráfico en los puntos de venta : Los compradores más jóvenes están cada vez más comprando en la periferia de las tiendas sin entrar en el centro de las mismas, visitando los pasillos de frescos y refrigerados y dando la espalda a las ofertas de alimentos procesados, ambientales y congeladas. Ante este panorama, las marcas recurrirán a los formatos de envases contemporáneos para ayudar a revigorizar los pasillos de las tiendas.
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