Pequeña avispa podría combatir la plaga de la caña de azúcar

Se trata de la avispa Cotesia flavipes, un insecto parasitoide, proveniente de la India, de alrededor de 2 mm de tamaño que cuando pica a la larva barrenadora implanta en ésta tanto sus huevos como unas sustancias que le suprimen el sistema inmunológico, lo cual favorece el desarrollo de su descendencia. Estas avispas, que fueron introducidas sin éxito en los años setenta por la agroindustria azucarera para controlar los barrenadores Diatrea, hoy vuelven a ser parte de la agenda de investigación con resultados alentadores tras el reciente brote de la plaga.

El panorama en el Valle del río Cauca empezó a cambiar desde 2013, cuando, según las hipótesis del sector, con el auge del maíz transgénico se provocó que dos especies de barrenadores (D. busckella y D. tabernella) se trasladaron a la caña de azúcar. Según la bióloga Leidy Julieth Salamanca, encargada de la investigación, “la producción de azúcar en la región pasó de ser impactada por dos especies a ser afectada por cuatro, ante lo cual las alternativas que se venían utilizando no son suficientes. Allí radica la importancia de encontrar en Cotesia flavipes un parasitoide complementario” (Periódico digital Universidad Nacional, 7 diciembre de 2018).

Las larvas de barrenador perforan el tallo de la caña, especialmente los nudos y entrenudos, se introducen en él y se alimentan desde adentro de la plata quitándole los nutrientes, especialmente la sacarosa, indispensable para los procesos industriales. Llegan a tal profundidad del tallo que no son alcanzados por los plaguicidas químicos (por ello es una de las plagas más difíciles de controlar), proceso que sí logran las avispas hembras Cotesia flavipes, que atraídas por el olor del excremento de las larvas depositan allí sus huevos.

La investigación adelantada por la bióloga Salamanca, en compañía por un equipo del centro de investigación de la caña de azúcar (Cenicaña) dirigido por el doctor Germán Vargas, entomólogo del centro, y María del Rosario Manzano, profesora de la UN Sede Palmira, arrojó que, en condiciones de campo, las avispas provocaron la muerte del 40-50% de las larvas estudiadas, las que más afectan la producción de azúcar y biocombustibles en el Valle del río Cauca.

A pesar de los resultados de la investigación, para que el establecimiento se pueda dar se requiere que quienes venden estas avispas reemplacen regularmente los ejemplares usados para la cría ya que, según la bióloga, “La reproducción entre parientes reduce el tamaño y la capacidad de reproducción, y además podrían perder el instinto para reconocer los olores naturales del excremento cuando se multiplican en laboratorio para su venta” (Periódico digital Universidad Nacional, 7 diciembre de 2018). En esa misma línea, se encontró que las avispas obtenidas en campo tienen mejor desempeño que las compradas comercialmente, en términos de tamaño y capacidad de búsqueda.

Para entender más detalles de la investigación, puede consultar el artículo: http://unperiodico.unal.edu.co/pages/detail/en-avispa-diminuta-estaria-la-forma-de- combatir-plaga-de-la-cana-de-azucar/

Apreciado lector: escríbanos, su opinión es muy importante para nosotros. María Camila Murcia – mmurcia@sac.org.co