Estados Unidos tiene la mayor cantidad de emisiones de carbono en la historia, está entre
los países que más se beneficiaría de reducir el calentamiento global y aun así, es el único
país que ha abandonado el Acuerdo de París.

En 2013, el gobierno Obama estimó el costo social federal del carbono en $37 USD por
tonelada de dióxido de carbono producido. Una estimación conservadora frente a recientes
investigaciones que ajustan el valor a los $200 USD dado que el calentamiento global
ralentiza el crecimiento económico, haciendo el valor más costoso.

A pesar de ello, según el estudio “Country-level social cost of carbon” (Ricke, Katharine.
Octubre 2018)[1] de la Universidad de California de San Diego, no sólo el costo social
global es mucho más alto que el estimado por el gobierno Obama- estaría entre 177 USD y
805 USD por tonelada- sino que el costo de Estados Unidos sería de aproximadamente $50
USD por tonelada. Éste es el segundo costo más alto después del estimado para India ($90
USD). Aún más preocupante, según el mismo estudio, el costo de carbono de sólo Estados
Unidos es mayor que el estimado por su gobierno para todo el mundo.

Por otro lado, según el paper “Global non-linear effect of temperature on economic
production”[2] (Burke Marshall), publicado en octubre de 2015, que estudia la relación entre
la temperatura promedio de los países y su PIB per cápita, la mayor productividad humana
se encuentra en las zonas donde la temperatura es de 13ºc, aproximadamente. Esto implica
que las economías con temperaturas promedio menores, como Canadá y Rusia, se
benefician de un mayor calentamiento pero éste podría ralentizar el crecimiento económico
para los países ubicados cerca al Ecuador que tienen altas temperaturas. Estados Unidos,
está ubicado justamente cerca al pico de temperatura óptima por lo que el calentamiento
global lo afecta más que a otros países más fríos como Alemania, Francia y Reino Unido.

El alto costo de los Estados Unidos es sorprendente, sobre todo porque las investigaciones
muestran que los países más pobres son los más vulnerables a los efectos del cambio
climático. Sin embargo, por tener el mayor PIB, Estados Unidos es el país que tiene más en
juego.

En conclusión y de acuerdo al estudio “Temperature and Growth: a panel analysis of the
United States”[3] publicado en marzo de este año por el Banco de la Reserva Federal de
Richmond, Estados Unidos debería implementar impuestos sobre el carbono puesto que
está entre el grupo de países que más podría beneficiarse por la reducción del
calentamiento global.

Para más información, consulte el artículo completo:
https://www.theguardian.com/environment/climate-consensus-97-per-cent/2018/oct/01/new-studyfinds-incredibly-high-carbon-pollution-costs-especially-for-the-us-and-india

Apreciado lector: escríbanos, su opinión es muy importante para nosotros.
María Camila Murcia – mmurcia@sac.org.co